2-4 comensales
↓2-4 comensales
6-10 comensales
12-16 comensales
La sensación de pesadez tras comer está relacionada con factores que van más allá de las calorías, como las grasas, proteínas y cantidad. Una receta bien equilibrada puede reducir la sensación de sueño.
*Valores aproximados. El resultado puede variar según peso, actividad física y necesidades individuales.
Para la salsa
30 min
Picamos la merluza en una procesadora y la aliñamos con el ajo y el perejil picados, el huevo, el pan rallado, sal y pimienta. Si la masa queda demasiado húmeda, añadimos un poquito más de pan rallado para poder manipularla y hacer las albóndigas, pero sin pasarnos, que no queden muy secas. Formamos las albóndigas, las doramos en una sartén con un poquito de aceite y las reservamos para añadirlas al final. Para hacer la salsa, en una cazuela con aceite a fuego medio pochamos la cebolla y el ajo bien picados. Una vez tengan un tono dorado, añadimos el vino y esperamos a que se evapore el alcohol durante un minuto. Diluimos una cucharada de harina en un vaso de caldo de pescado y lo vertemos en la cazuela con la cebolla y el ajo. Removemos para deshacer los posibles grumos que pudieran quedar y añadimos el resto del caldo de pescado, un puñado de perejil picado y la hoja de laurel. Cocinamos la salsa destapada a fuego medio durante 5-7 minutos para que, poco a poco, se vaya reduciendo. Incorporamos las albóndigas a la cazuela y cocinamos todo junto 5 minutos más para que se terminen de hacer. Probamos, rectificamos de sal y pimienta y servimos con más perejil fresco picado.
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